Tanto a niños como a adultos nos encantan los puzles, y no es de extrañar, resolver puzles tiene un montón de beneficios: Favorece la concentración, la memoria visual, la capacidad de observación, la motricidad fina, el pensamiento lógico… y además forman parte de los juguetes STEM ya que ayudan a desarrollar habilidades matemáticas.
Y por si fuera poco, está probado que las personas que resuelven puzles tienen menos probabilidades de desarrollar Alzheimer.
¡Todo son ventajas! ¿Pero quieres saber cómo elegir los puzzles adecuados para cada edad?
Entre los 12 y los 24 meses, lo ideal son los puzles encajables de madera o magnéticos. Suelen ser de entre 3 y 6 piezas grandes y coloridas, para que se les haga más fácil manejarlas y diferenciarlas. Lo mejor es mostrarles el puzzle ya hecho, y después separar las piezas para que volváis a montarlo juntos, así empieza a conocer la dinámica.
En cuanto a la temática, los puzles de animales y figuras geométricas triunfan porque son objetos que se distinguen fácilmente.
A esta edad ya se les puede ofrecer puzles de entre 10 y 30 piezas, tanto de madera como de cartón grueso. El tamaño de las piezas debe seguir siendo grande, aunque las ilustraciones o las formas ya pueden ser más ricas en detalles. Reconocen personajes y escenas de hábitos diarios, por eso las temáticas que les encanta suelen ser escenarios que conozcan (como la casa o el parque), personas, oficios o incluso números y letras.
Con 5 añitos ya están preparados para formar los mismos puzzles que los adultos. Si están habituados a jugar con puzles pueden enfrentarse a juegos de más de 50 piezas y de tamaño más pequeño. Pasarán un gran rato solos o en familia intentando resolver el puzle. En cuanto a diseño les encantan los que se ven más realistas o con más detalles. A esta edad también les encantan los castillos, piratas, dragones, lugares del mundo… Y, en definitiva, todo aquello que les cuente una historia. Que ver el puzzle terminado sea casi como leer un cuento.
A partir de los 8 años, encontrarán la satisfacción de terminar un puzzle de más de 200 piezas. (¡Incluso los hay de 1000 piezas!) Seguimos con la temática de imágenes que parecen casi postales; llenas de detalles para que el reto incluya trabajar la observación y la paciencia. De hecho, todos disfrutaremos con un puzzle de esa magnitud, desde el más peque de la casa hasta el bisabuelo. ¡Nunca es tarde para aficionarse a ellos! Sólo hay que tener un poco de tiempo y paciencia, tampoco hace falta acabarlo el mismo día ;-)
Recuerda que las edades siempre son orientativas, cada peque es un mundo y no hay que sentir ningún tipo de presión. Hacer puzles es jugar, hay que divertirse y tomarlos con calma.
Todos los puzzles que hemos enseñado están en kinuma separados por el número de piezas, ¡para que te sea más fácil encontrar el que te guste!
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