Una construcción genial. Con sencillos listones se puede construir un puente, una cupula o lo se te ocurra, que se aguanta por si mismo. Sin cola, sin cuerdas y sin un solo tornillo o clavo. Lo que si se necesita para la construcción es una mano tranquila y un poco de tacto en las puntas de los dedos.
El genial inventor de esta construcción no es nadie mas que Leonardo da Vinci. Se puede comprender la genialidad de Leonardo, siguiendo las instrucciones de montaje según se adjuntan, inspiradas con los dibujos originales. Lo interesante es que se puede empezar solo con un pequeño puente que consiste en dos módulos, y luego ir ampliando hacia un puente mas grande.
100 coloridos plaquitas de madera de tilo, para pequeños y grandes constructores.